Basándome en mi experiencia de muchos años, he llegado a varias conclusiones que me gustaría compartir hoy sobre ciertos errores que encuentro en la forma de maquillarse de algunas personas.
1.- Elegir un color de base de
maquillaje muy distinto al de nuestra piel (o “efecto careta”).
Cuando
elegimos una base de maquillaje lo mejor es elegirla del mismo color de nuestra
tez. En mi opinión como mucho un tono por arriba/abajo. Es muy frecuente ver
que algunas mujeres con tal de parecer mas morenitas eligen un color demasiado
dorado, olvidándose al menos de maquillar también cuello y orejas para que no se vea la diferencia.
En cualquier caso elegir un color muy oscuro nos puede hacer parecer más
mayores de lo que somos. El caso contrario es elegir un color muy claro. Es
verdad que las bases de maquillajes claras quitan algunos años a las pieles
maduras, pero tampoco hay que pasarse o pareceremos un zombie.
2.- Equilibrio ojos/labios.
Es
uno de los consejos que seguro casi todas habéis leído ya en alguna parte. Para
mi es muy obvio. Maquillar mucho los ojos, con varios tonos bastante oscuros y
luego maquillar los labios de rojo o cualquier otro color intenso puede
resultar algo “cargante” a la vista y por supuesto sumarnos años. Si se tienen
20 años y/o se trata de un maquillaje de noche (vas a estar en una discoteca,
terraza de verano……) tiene un pase. Aunque en mi opinión lo más elegante para
cualquier ocasión es elegir entre maquillar con intensidad ojos o
labios, no las dos cosas. Por ejemplo un “smokey eyes” en negro o marrón queda
fenomenal con los labios en un rosa clarito y un colorete discreto.
3.- Prebase párpados.
Resulta
muy interesante aplicar algún producto antes de las sombras de ojos para
aumentar su fijación y que no se corran y se acumulen en los plieges a la media
hora de maquillarnos. Hay productos muy interesantes para este fin. Los tienen
casi todas las marcas. Tiene muy buena fama el de Too Faced (en España de venta
en Sephora).
Un
método muy eficaz y adecuado si no quieres gastar mucho dinero es aplicar
primero la misma base de maquillaje que te has puesto en el resto de la cara.
Después una pequeña cantidad de polvos sueltos translucidos por todo el parpado
ayudándote con una borla. Acto seguido aplicar por todo el parpado una sombra
muy clara (blanca, color beis, hueso….) que nos servirá para rematar una buena
base antes de aplicar los demás tonos.
4. Tipo de base de
maquillaje/tipo de piel.
Dependiendo
del estado de la piel son mas convenientes unas texturas u otras en la base de
maquillaje que elijamos. Esto también ocurre con el corrector de ojeras.
Una
piel sin arrugas, sin manchas, sin imperfecciones….. se puede permitir
cualquier tipo de base de maquillaje. Eso ya dependerá del gusto de cada una. Pero
una piel con arrugas debería evitar
maquillarse con texturas en polvo (maquillajes minerales) o
muy densas porque éstas las marcan más si cabe, acumulandose el producto en
ellas. Lo ideal es aplicar una base fluida y poner muy pocos polvos encima para
fijar y matar brillos. O nada de polvos. Además ahora está de moda llevar la
piel luminosa, no se lleva la tez mate.
En una piel
con manchas, rojeces o marcas de acné por ejemplo, una base muy ligera o en
polvo no va a tapar suficientemente estas imperfecciones. Por tanto yo aquí
recomiendo las bases compactas (en tarrina o stick) que se pueden aplicar con
esponja humedecida y cubren más.
5.- Línea de pestañas.
No
siempre queda bien delinear el ojo en todo su largo. En
el parpado inferior por dentro, no siempre queda bien el blanco o el negro. Depende
de cada persona y de su forma del ojo.
Si
se trata de un ojo que redondea, caso frecuente a medida que cumplimos años, o
unos ojos saltones evitaremos delinear las pestañas superiores completamente. Esto
nos haría los ojos todavía mas redondos. Y lo que pretendemos es alargarlos o
rasgarlos que es lo que favorece más. Por eso solo delinearemos de la mitad hacia
fuera y alargando un poco mas allá de las pestañas la línea, haciendo un poco
de rabillo. Muy importante: difuminar los extremos con un pincel.
En
el párpado inferior depende mucho. Hay que ver como sienta, tampoco hay unas
reglas fijas dependiendo de tamaño o redondez. En general a mi me parece que si
se tiene un ojo de tamaño normal y el parpado de abajo es bastante recto (línea
horizontal) puede sentar bien pintar el ojos por dentro de blanco (mejor beis).
Pero si este párpado es redondo por naturaleza o ha empezado a caer por la edad
mejor lo pintaremos de un color oscuro. Si los ojos son pequeños es mejor no maquillar el parpado
inferior, o en todo caso sólo el tercio exterior y por fuera.
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